El judo es uno de los deportes de combate más practicados en el mundo, con muchos practicantes en Francia y Europa. Actividad física y técnica basada en numerosos movimientos y agarres específicos, el judo requiere fuerza, precisión y agilidad, más que resistencia, aunque este último criterio no debe excluirse. Desde el punto de vista energético, el judo es un deporte que, por lo tanto, se basa esencialmente en la vía anaeróbica, es decir, el ejercicio no excede de unos pocos minutos y se basa en la liberación de ATP y carbohidratos. Por lo tanto, podríamos pensar que el judo y sus diversas técnicas de agarre se basan en la fuerza y el poder muscular. En estas condiciones, ¿qué dieta debe favorecerse en el contexto de la práctica intensiva de judo en el entrenamiento y la competición?
Optimizar la ingesta de carbohidratos para asegurar una adecuada liberación de energía
Las competiciones y el entrenamiento de judo requieren la liberación de energía, tanto física como mental, porque la concentración en el juego y los movimientos del oponente son tan importantes como su agilidad y su fuerza mientras practica las agarradas al oponente. En base a estos criterios, los judokas deben promover la presencia de carbohidratos en su dieta, sin olvidar la importancia de las proteínas (alrededor del 25% de su ingesta diaria). Una dieta equilibrada, rica en azúcares lentos proporcionados por la pasta, la quinua, el pan y las verduras densas en carbohidratos, le ayudará a almacenar suficientes carbohidratos para hacer frente a su entrenamiento de judo y preparar sus competiciones. La carne, el pescado, los huevos y los productos lácteos le proporcionarán la proteína necesaria para mantener las fibras musculares y desarrollar la fuerza una vez en el tatami. Las verduras y las frutas frescas contribuirán a la ingesta esencial de vitaminas y minerales.
Cómo controlar el peso corporal para las competiciones de judo
La agilidad y la fuerza necesarias para el judoka también dependen de la nutrición deportiva para el manejo preciso del peso corporal durante el año de entrenamiento pero especialmente antes de las competencias. El manejo del peso ideal de competición de un judoka puede determinarse dos o tres semanas antes de las competiciones. Se tratará de tener en cuenta el gasto de energía provocado por el entrenamiento para comer lo suficiente, sin provocar un aumento de peso que frustre la eficacia de su actividad deportiva durante la semana. Intente mantenerse un poco por debajo de su peso corporal ideal comiendo una dieta alta en carbohidratos uno o dos días antes de su participación en la competición para maximizar las reservas de glucógeno necesarias para la fuerza y la ejecución óptima de las retenciones sobre el oponente. Naturalmente, evita comer demasiado copiosamente unas horas antes de las competiciones para evitar molestias intestinales especialmente perjudiciales para tu rendimiento en el tatami.
Los judokas deben prestar especial atención a la hidratación antes y durante las peleas
Para su cuerpo, la liberación óptima de energía no es posible sin una óptima hidratación celular. El agua y los minerales que contiene deben ser suministrados a su cuerpo antes y durante sus sesiones de entrenamiento o peleas. Tomar una bebida isotónica durante las competiciones puede considerarse razonablemente. Después de un entrenamiento o una competición, proporcione a su cuerpo carbohidratos, proteínas y ácidos grasos esenciales para promover una rápida recuperación y una mejor preparación para su próximo combate.