La gente tiende a subestimar la importancia de estar atento, especialmente en el ajetreado mundo de hoy. Nos hemos acostumbrado a subir al coche cada mañana y llegar a nuestros destinos sin recordar el viaje hasta allí.
Tenemos una tendencia a perdernos en los pensamientos y a correr en piloto automático sin tomarnos el tiempo de prestar atención a lo que pasa a nuestro alrededor. Aunque este estado de ánimo parece ser una parte natural de nuestras rutinas diarias, correr en piloto automático puede ser un gran desencadenante de problemas como el estrés, la ansiedad y la depresión.
Si te encuentras corriendo en modo de piloto automático y te distraes con pensamientos errantes, puedes entrar en el momento presente practicando la atención.
No sólo le permite experimentar la vida más plenamente, sino que también puede proporcionar una variedad de beneficios para su salud y bienestar general. Profundicemos en este tema.
¿Qué es la atención plena?
Antes de entrar en los beneficios significativos que la atención plena puede tener en su salud, es importante entender lo que es la atención plena.
En pocas palabras, la atención es el acto de estar presente. Cuando estás en un estado de consciencia, estás completamente inmerso en lo que está pasando y en las actividades que estás realizando.
Ya sea que estés conduciendo, caminando o simplemente sentado en silencio, la práctica de la atención te mantiene en contacto con tu cuerpo y el espacio que estás ocupando en el momento actual.
El Dr. Amishi Jha, entrenador de mindfulness y profesor asociado de psicología en la Universidad de Miami, compara la mente con un reproductor de mp3 que nos permite viajar a través del tiempo.
Somos capaces de poner nuestra mente en «avance rápido» y pensar en las próximas obligaciones o eventos, o podemos poner nuestra mente en «rebobinar» y pensar en el pasado.
La atención implica dejar nuestras mentes en «juego» y permanecer en el momento presente. Esta práctica requiere que acepte plenamente y se dedique al momento presente sin juicios ni reacciones emocionales. Simplemente aceptas el momento por lo que es.
Es importante notar que mientras la atención plena se asocia a menudo con las creencias religiosas y espirituales orientales, no tienes que pertenecer a ningún sistema de creencias en particular para practicarla y disfrutar de sus beneficios para la salud.
Los beneficios de la atención plena
La atención no es sólo un concepto de nueva era, de sentirse bien. Permanecer presente y atento puede tener un impacto positivo en tu salud y bienestar general. Exploremos algunos de los beneficios que proporciona la atención plena.
Construye la resistencia
Según el Dr. Jha, la práctica de la atención consciente a diario puede hacerte más resistente y darte una mayor capacidad de recuperación del estrés.
Debido a que la atención requiere que permanezcas en el momento presente sin juicios o reacciones emocionales, aquellos que la practican pueden mejorar su capacidad para enfrentar el estrés de frente. La atención plena te permite ser más compasivo contigo mismo y te ayuda a dejar de tomar el estrés de forma personal. Te permite observar y aceptar las situaciones estresantes sin rumiarlas.
En lugar de centrarse en el resultado futuro del estrés o en las decisiones pasadas que pueden haber llevado a dicho estrés, los que permanecen atentos se centran en encontrar soluciones en el momento presente.
Muchas personas que han dominado el arte de la atención pueden superar situaciones estresantes con poca o ninguna interrupción en su funcionamiento diario normal.
Puede combatir la ansiedad y la depresión
Hay una razón por la que la meditación se sugiere a menudo para aquellos que sufren de ansiedad o depresión. La atención puede aliviar los síntomas de estas condiciones mentales estresantes.
Para muchas personas, la ansiedad es exacerbada por los constantes pensamientos y preocupaciones sobre el futuro. La depresión puede ser desencadenada o empeorada por pensamientos negativos sobre el pasado. Ya que estar atento requiere estar enfocado en el momento presente, te da más control sobre estos pensamientos.
Según la Dra. Elizabeth Hoge, profesora adjunta de psiquiatría en la Facultad de Medicina de Harvard, la práctica de la atención consciente hace más fácil diferenciar un pensamiento de resolución de problemas de una preocupación que sólo contribuye al estrés mental.
Mejora tu capacidad de decisión
Practicar la atención de forma regular puede hacer que seas mejor tomador de decisiones al hacer más fácil centrarte en la lógica y la resolución de problemas en vez de en tus emociones.
Un estudio de la Sociedad Psicológica Británica encontró que ser más consciente hace que las personas sean menos propensas a tomar decisiones basadas en el sesgo del costo hundido, que es el hábito de permanecer en situaciones negativas debido al tiempo y la energía que ya se ha invertido o desperdiciado.
Esta falacia es lo que hace que permanezcamos estancados en situaciones negativas y malos hábitos en lugar de fijarnos nuevas metas que puedan mejorar nuestras vidas y hacernos más felices.
Si alguna vez te has encontrado terminando una pinta de helado sólo porque ya te has comido la mitad, entonces es probable que tomes decisiones basadas en el sesgo del costo hundido.
El Dr. Jha destaca la importancia del entrenamiento de la atención. Para muchos de nosotros, puede ser difícil romper el mal hábito de perderse en nuestros pensamientos. Sin embargo, entrenar la mente es muy parecido a entrenar el cuerpo físico, tienes que practicar para ver los resultados.
Hay bastantes maneras de entrenarse para ser más consciente. Una de las sugerencias más comunes es la meditación diaria. Meditar requiere que te sientes en silencio y te concentres en tu respiración y tus cinco sentidos mientras dejas que los pensamientos de tu cabeza vengan y vayan.
El ejercicio físico también puede ser una gran manera de practicar la atención.
Al realizar cualquier actividad física, puedes concentrarte en tu respiración y en las sensaciones que te rodean. El yoga es una actividad popular para aquellos que buscan practicar la atención, pero también se puede hacer caminata, carrera o entrenamiento con pesas.
No importa qué forma de ejercicio elijas, la clave es centrarse en tu respiración y tus cinco sentidos mientras dejas que tus pensamientos vengan y vayan.